En un movimiento que intensifica las tensiones entre el gobierno de José Raúl Mulino y los sindicatos, Saúl Méndez, secretario general del Sindicato Único Nacional de Trabajadores de la Construcción y Similares (Suntracs), solicitó asilo político en la Embajada de Bolivia en Panamá durante la madrugada del 21 de mayo. El líder sindical, figura clave en las protestas contra las políticas del Ejecutivo, ingresó al recinto diplomático saltando su cerca perimetral y entregando una nota formal al encargado de negocios boliviano, Carlos Javier Suárez Cornejo, quien le otorgó protección temporal mientras se evalúa su solicitud .
El ingreso a la embajada y el protocolo diplomático
Según relatos oficiales, Méndez llegó a la sede diplomática ubicada en el barrio El Cangrejo (Ciudad de Panamá) alrededor de las 3:00 a.m., evadiendo controles de seguridad. Tras saltar la cerca, tocó la puerta principal y presentó una carta solicitando asilo, argumentando persecución política por parte del gobierno panameño . La Cancillería panameña confirmó que Bolivia analizará el caso mediante su Consejo Nacional de Refugiados, tal como establecen los protocolos internacionales .
Contexto: Huelgas, cierre de cooperativas y acusaciones de lavado
La solicitud de Méndez ocurre en medio de una huelga indefinida liderada por el Suntracs y el gremio de docentes, que cumple un mes de protestas contra la reforma al seguro social (Ley 462) y proyectos como el embalse de Río Indio . La situación escaló el 20 de mayo, cuando el Instituto Panameño Autónomo Cooperativo (Ipacoop) ordenó el cierre de la Cooperativa de Servicios Múltiples Suntracs, alegando 14 irregularidades financieras y sospechas de lavado de capitales .
Aunque Méndez no está formalmente imputado, su sindicato enfrenta presión judicial: el 16 de mayo, el dirigente Jaime Caballero fue detenido preventivamente por presunto lavado de dinero, un caso que su abogado, Rolando Murgas, calificó de «simulación» sin bases jurídicas .
La retórica del gobierno y la respuesta sindical
El presidente Mulino ha tildado al Suntracs de «mafia» y acusa al sindicato de promover una «agenda oculta» para desestabilizar el país . Méndez, por su parte, ha respondido desde las redes sociales: «Quieren desaparecernos, pero el SUNTRACS resiste. No nos arrodillaremos» . El sindicato también denunció persecución política tras el cierre de sus cuentas bancarias en 2023 y 2024, medidas que vinculan a una estrategia para debilitar su influencia .
Trayectoria de Méndez: De candidato presidencial a refugiado
Méndez, abogado de formación y técnico en relaciones laborales, ha sido una figura emblemática del sindicalismo panameño. En 2019, se postuló como candidato presidencial por el Frente Amplio por la Democracia (FAD), obteniendo solo el 0.69% de los votos . Su alineamiento con gobiernos de izquierda, como el de Nicolás Maduro en Venezuela, y sus críticas a Mulino —a quien llama «dictadorzuelo»—, han marcado su perfil político .
Reacciones internacionales y próximos pasos
Mientras Bolivia evalúa la solicitud, la embajada mantiene sus puertas cerradas y resguarda a Méndez bajo protección temporal . Organizaciones de derechos humanos y sectores sindicales exigen transparencia en el proceso, mientras el gobierno panameño insiste en aplicar la ley contra lo que considera «acciones desestabilizadoras» .
🔗 Fuente: La Estrella de Panamá
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Este artículo integra testimonios oficiales, contexto histórico y análisis político, ofreciendo una visión crítica de un episodio que refleja la lucha por los derechos laborales y las tensiones de poder en Panamá.
